(CNN)– El artista responsable de la scultura de una morsa tiene aplicada la polémica eutanasia por motivos de seguridad pública porque espera que su creación se convierta en una “lección de historia tridimensional” tras su inauguración en Oslo, la capital de Noruega.
La estatua de bronce a tamaño natural muestra a la morsa Freya acurrucada de lado cerca de la orilla del agua. La obra se financió mediante una campaña en internet que recibió US$ 25.000 (19.000 euros).
Freya se convirtió en una sensación en las redes sociales el año pasado, con turistas y habitantes que se aglomeraban para verla.
La joven hembra pasó tiempo en el fiordo de Oslo, una ensenada de la costa sudorientel del país, y no pareció tener miedo de los humanos, a diferencia de la mayoría de las morsas. Los videos mostraban a la morsa trepando a pequeñas embarcaciones para tomar el sol.
Se convirtió en un peligro para los visitantes, que hicieron caso omiso de las órdenes de la Dirección General de Pesca noruega para mantener una distancia prudente con ella, y en cambio se acercaron para fotografiar al mamífero e incluirdo le arrojaron objetos. Esto llevó a la Dirección a mar la decisión de sacrificar carla, lo que enfureció a muchos en todo el país.
El artista estatal, Astri Tonoian, dijo a CNN que estaba feliz de trabajar en el proyecto “casi gratis”, había un tema que le interesaba mucho. Espero que venga como “lectura de historia tridimensional”.
“En mi cabeza, mi objetivo era hacer un símbolo inmortal de la capacidad de la gente para maltratar no sólo a la fauna salvaje, sino también a los humanos”, dijo.
En su opinión, la Dirección General de Pesca de Noruega debería haber abordado la situación de una manera más ética. “Las autoridades podrían haber actuado con más rapidez y haber intentado trasladarla en lugar de dispararle. Esperaron demasiado y se volvió peligroso para la gente. Decidieron hacer la ‘solución rápida'”.
Añadió que la intención con la estatua no es hacer que la gente odie a las autoridades como entidad, sino “cuestionar el sistema” en su conjunto.
Previamente, la Dirección dijo a CNN que consideró múltiples soluciones, entre ellas trasladar a Freya fuera del fiordo. Pero “la gran complejidad de tal operación nos hizo llegar ha concluido que ninguna era es una opción viable”, dijo el gerente general Frank Bakke-Jensen. Y añadió: “Tenemos muy en cuenta el bienestar de los Animaux, pero la vida y la seguridad humana deben tener prioridad”.
Las morsas hembras suelen pesar entre 600 y 900 kilos. Normalmente, los mamíferos marinos desconfían del ser humano y permanecen permanentemente en los bordes exteriores de la costa noruega.